La economía argentina ingresó en el tramo final del año en niveles de prepandemia. De acuerdo al INDEC, en agosto, por primera vez en la era del COVID-19, la producción de bienes y servicios superó en 0,3% los niveles de febrero de 2020. Se recuperan las actividades más afectadas por el COVID, de acuerdo al Informe de Panorama Productivo del CEP-XXI, destaca que el 70% de los sectores mejoró su desempeño respecto al primer trimestre del año.

Los primeros datos adelantados de septiembre, octubre y lo que va de noviembre auguran en líneas generales una consolidación de dicha tendencia de recuperación, de modo que es dable esperar que la actividad económica esté ya en niveles incluso superiores al promedio de 2019.  El informe elaborado por el centro de estudios del Ministerio de Desarrollo Productivo destaca que en agosto, según los últimos números del INDEC, la economía ya había superado por 0,3% el nivel de febrero de 2020, a lo que agrega que “los primeros datos adelantados de septiembre, octubre y lo que va de noviembre auguran en líneas generales una consolidación de dicha tendencia de recuperación”. Eso, asegura, podría indicar que “la actividad económica está ya en niveles similares o incluso superiores al promedio de 2019”.

El informe detalla que en los primeros días de noviembre, la movilidad de las personas, que correlaciona con la actividad económica, superó los niveles previos a la pandemia. Así, la gradual normalización de la actividad económica está permitiendo una mayor homogeneidad en los ritmos sectoriales de recuperación, que hasta ahora se venía dando de una manera demasiado dispar. De acuerdo al CEP-XXI, las ramas que a principios de año eran las que más caían frente a 2019 (como gastronomía, turismo, transporte de pasajeros y actividades culturales) fueron las que más se recuperaron en los últimos meses, a medida que las actividades que venían liderando la mejora económica empiezan a moderar su ritmo de expansión. En concreto, en septiembre 433 de 622 sectores productivos (el 70%) mejoraron su desempeño respecto al del primer trimestre del año.

“El incremento de la circulación está impactando directamente en las actividades más castigadas por la pandemia, tales como gastronomía, turismo, servicios recreativos y culturales, el transporte de pasajeros y ciertos segmentos del comercio minorista (particularmente el de indumentaria y calzado, con mayor presencia en centros de compras)”, explica el Panorama mensual del CEP-XXI. En tanto, agrega, la mejora del sector hidrocarburífero –indirectamente beneficiado de la suba de la movilidad– también ha sido un motor de la recuperación reciente, con el consiguiente impacto en la cadena de proveedores industriales, lo que contribuye a que gradualmente la recuperación económica vaya siendo más homogénea.

Por otro lado, menciona los últimos datos de INDEC, que indican que la industria creció 1,1% mensual en septiembre, y en términos anuales mejoró 14,3% frente al mismo mes de 2019 y 8,6% respecto a septiembre de 2018. Además, en septiembre de 2021 casi el 80% de los sectores industriales operó por encima de los niveles de septiembre de 2019 y el uso de la capacidad instalada en la industria superó el 65%, su mayor nivel desde abril de 2018. Como impacto directo de esa mejora, después de cuatro meses de estabilidad la industria volvió a crear puestos de trabajo en septiembre, y ya cuenta con 42.000 trabajadores y trabajadoras más que a finales de 2019 (un alza del 3,7%).

En ese sentido, el informe destaca al sector farmacéutico (que alcanzó el mayor nivel de su historia, con más de 40.000 puestos de trabajo formales), al de maquinaria agrícola (con la mayor cantidad de puestos de trabajo formales desde 2013) y determinados segmentos de la industria de alimentos y bebidas, como cervezas, proteínas animales, alimentos para animales o productos de molinería, que actualmente tienen el mayor número de trabajadores y trabajadoras de por lo menos 25 años. También señala que desde enero a septiembre, la producción industrial creció 6,0% contra 2019, lo que la convierte en una de las recuperaciones industriales más veloces del mundo, detrás de la de China (+13,4%), pero por encima de países como Brasil (0,0%), Chile (+2,0%), España (-3,2%), Francia (-5,8%), Italia (-1,1%), India (-2,5%), México (-2,9%), Alemania (-6,7%), Estados Unidos (-1,3%) o Japón (-6,0%).

Uno de los sectores destacados de la recuperación es el de maquinaria agrícola, que está teniendo el mejor año en lo que va del siglo XXI, con la producción de tractores en camino a tener el nivel más alto desde 1986. A su vez, se señala que en los últimos meses sectores que habían estado muy afectados por la pandemia (como el de los hidrocarburos y su cadena de valor, y el de calzado) se recuperaron vigorosamente. En el caso de calzado, en septiembre se alcanzó la mayor producción en cinco años, en tanto que la mejora en la industria petrolera reactivó con fuerza la producción de tubos sin costura y de maquinarias de uso general.

En cuanto a los datos adelantados de octubre y noviembre, basados en el consumo de energía de la industria, en el décimo mes del año la producción creció 2,4% contra octubre de 2019 (mes en el que hubo tres días hábiles más que en octubre de 2021, que contó con un fin de semana “extra” largo por el feriado del 12 de octubre) con 9 de 14 sectores industriales en expansión frente a 2019. A su vez, la producción de acero crudo creció 17,3% en octubre respecto a dos años atrás, los despachos de cemento aumentaron 20,1% y la fabricación de vehículos automotores mejoró 28,8%.

Los datos preliminares de las últimas 4 semanas muestran que el consumo de energía industrial fue el más alto en cuatro años para esta época del año, superando en 4,4% a 2020, en 3,1% al de 2019, y 2,8% al de 2018.