El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) adquirió una computadora de alto rendimiento que tiene 300 núcleos. De acuerdo al comunicado, es un equipo de cómputo de alto rendimiento que posibilitará ejecutar modelos numéricos con mayor velocidad y resolución, que se aplicará para mejorar la calidad de los pronósticos.
El equipo de computación de alto rendimiento (High performance Computing o HPC en inglés) es una herramienta muy importante en el desarrollo de simulaciones para problemas complejos. La flamante HPC (High performance computing), está formado por un servidor central, 10 servidores de procesamiento y un almacenamiento de 55 Terabytes, todo conectado con una red de gran velocidad (Infiniband). Con esta tecnología, el SMN podrá utilizar el modelo WRF (Weather Research and Forecasting model) para toda Argentina a 48 horas con 4 km de resolución, en aproximadamente tres horas.
Yanina García Skabar, responsable de Investigación más Desarrollo de la institución explicó: “Estábamos ejecutando el WRF de manera experimental, solamente para el centro y noreste de Argentina (una cuarta parte del territorio), y se tardaba 5 horas en producir un pronóstico a 48 horas. Con el nuevo equipo se logra bajar a 3 horas ese tiempo y cuadruplicar el territorio para el cual se pronostica. La mejora es muy grande ya que el nuevo equipamiento permite generar un pronóstico para todo el país en alta resolución (o sea la distancia que hay entre dos puntos para los que el modelo calcula un pronóstico) en un plazo de tiempo que resulta útil para la oficina de pronóstico”.
El WRF es un modelo numérico de código abierto que se usa en más de 150 países. Es un modelo moderno y que está en continuo desarrollo, incluyendo constantemente actualizaciones y nuevos módulos producidos por la comunidad científica de todo el mundo. Para poder realizar pronósticos numéricos para todo el país en alta resolución era indispensable contar con capacidad de cómputo de alto rendimiento. Este equipo de HPC logra generar los pronósticos numéricos en un tiempo que permitirá al pronosticador interpretarlo y ajustarlo para emitir el pronóstico oficial. Si bien este paso representa un gran avance, es necesario potenciar aún más la capacidad de cómputo para poder generar un ensamble de pronósticos y medir la incertidumbre del pronóstico de una manera objetiva.
Se prevé que a mediados de diciembre el área de pronóstico pueda empezar a utilizar los pronósticos generados con el modelo WRF en alta resolución de modo experimental. “Se va a implementar un nuevo software que realiza el control operativo del proceso y así garantiza que todo funcione. Porque para correr el modelo hay que hacer una secuencia de procesos (pre- y post) y todas esas etapas se van a controlar automáticamente desde el área de sistemas. Estamos terminando de armar todo eso” agregó la científica García Skabar.