El sábado 27 de junio, veinte niños y niñas de la Fundación Pupi, tuvieron la posibilidad de tener su primer vuelo en avión gracias al programa de la Fundación Aerolíneas denominado “mi Primer Vuelo”.
En algún punto parecía que el clima de esa mañana iba a complicar la experiencia, desde el desayuno que compartieron en PUPI, en Escalada, los chicos estaban ansiosos; muchos de ellos de varias villas: 1º de Mayo, Tres de Febrero, Los Chaqueños, Villa Talleres y El Tala. Al llegar al aeropuerto se terminó de confirmar que uno de sus mayores deseos se haría realidad.
Recibieron su tarjeta de embarque, tuvieron que hacer el chequeo previo, les tocó una puerta de embarque tipo “oruga” que los llevó al avión, un Boeing 737 de los más modernos. Una vez instalados, escucharon las medidas de seguridad y vino el despegue.
Imposible de describir esa mezcla de emoción, temor y adrenalina de alejarse del suelo. Una vez que tomaron un poco de confianza, empezaron a observar por las ventanillas un recorrido que los llevó por puntos de la ciudad de Buenos Aires, algunos estadios de fútbol, y luego, también algunas localidades del Gran Buenos Aires.
Con el aterrizaje siguió la emoción, esa sensación de volver a tierra firme entrelazada con las ganas de que el vuelo fuese más largo. Recibieron un diploma de primer vuelo, cruzaron a la Costanera y regresaron a la Fundación con una nueva gran experiencia, para seguir creciendo, aprendiendo y ampliando su mundo.