La Autoridad Regulatoria Nuclear (ARN) conmemora el segundo aniversario de la emisión de la Licencia de Operación de la Central Nuclear Embalse (CNE) para su segundo ciclo de vida, otorgada el 22 de agosto de 2019. Se trata de un hito regulatorio para la instalación y la República Argentina, por tratarse del primer licenciamiento de extensión de vida de una central nuclear en el país, que funcionará una década más.

La emisión de la licencia se dio en el marco del Proyecto de Extensión de Vida (PEV) de la CNE, cuyas primeras tareas comenzaron en 2007, etapa durante la cual la ARN realizó el control regulatorio, que incluyó la evaluación de la ingeniería de las modificaciones y los reemplazos con impacto regulatorio (en la seguridad nuclear y radiológica, las salvaguardias y la protección física), y la inspección de su implementación, atendiendo especialmente los aspectos vinculados a la seguridad.

El PEV de la CNE también representa un hito a nivel mundial, dado que es la tercera central nuclear de tecnología CANDU en realizar el proceso de reacondicionamiento que le permitiría operar por un lapso de hasta 30 años en un segundo ciclo de vida. Además, es el único proyecto hasta la actualidad que incluyó el reemplazo de los generadores de vapor.

A lo largo del proceso de licenciamiento, la ARN desempeñó un rol fundamental como regulador, orientado a garantizar la seguridad radiológica y nuclear, incluyendo la Puesta en Marcha hasta alcanzar el 100% de Plena Potencia, a través de la verificación del cumplimiento de la normativa y la documentación de carácter mandatorio.

La emisión de esta Licencia de Operación para el segundo ciclo de vida de la CNE autoriza la continuidad por 10 años más a la generación de energía y la producción de cobalto 60 para el mercado de radioisótopos de uso medicinal e industrial.