Por Emiliano Delio

La Culpa es de la Tierra, con la dirección y versión libre de Bodas de Sangre por parte de Luis Rivera López; se presenta los sábados a las 20:00 en el Centro Cultural de la Cooperación de la avenida Corrientes 1543.

La obra; basada en la tragedia de Federico García Lorca, escrita a partir de un hecho real de 1928; no pierde vigencia por abordar temas universales, que la convierten en un clásico. Y se presta a dúctiles adaptaciones, que incluyeron el traspaso al cine, la radio o el ballet. En este caso, hay que resaltar el gran trabajo de iluminación teatral, a lo que se le suma la música en vivo por parte de Naya Ledesma; que crean climas especiales acorde a las tierras andaluzas de amor, pasión y crímenes.

La interpretación de los personajes lorquianos están a cargo de Mónica Felippa, caracterizada de esta manera por el director: “Una actriz titiritera de probada experiencia y maestría (Premio Javier Villafañe a la mejor titiritera y recientemente de aclamada labor en Salvajada, de Kartún, en el Teatro Nacional Cervantes), junto a una ejecutante musical en vivo, autora de melodías y canciones, dan pie a la posibilidad de un verdadero acto de prestidigitación actoral-titiritero y musical. Las escenas son abordadas desde la capacidad de narración de la actriz, cambiando de personaje, tanto mediante títeres de diversas técnicas, como volcándose sobre su propio cuerpo, potenciando el desarrollo de las situaciones”

Así se logra una conjunción original, donde las pulsiones básicas en las que gira la obra, son poéticamente representadas a través de paisajes, maniquíes, luces, sombras y múltiples sonidos realizados con diversos instrumentos. El amor no correspondido, el deseo de morir y el de asesinar hacen avanzar la trama.

Dice Rivera López: “Se trata, sin dudas, de una obra cumbre de la literatura en lengua española de todos los tiempos. Su actualidad reside en la relación directa entre las acciones de los personajes y los instintos más básicos del ser humano: las pasiones, las represiones y la posibilidad humana de transgredir las convenciones establecidas, aunque las consecuencias puedan ser trágicas”

 

Ficha

Actriz y titiritera: Mónica Felippa

Música y ejecución en vivo: Naya Ledesma

Títeres, escenografía y vestuario: Alejandro Mateo

Realización escenográfica y títeres: Guillermo Bechthold

Video: Dante Sultani

Fotografías: Lucía Rivera López

Producción ejecutiva: Sergio Rower

Iluminación y puesta en escena: Luis Rivera López

Asistente de Dirección: Andrés Manzoco

Dirección: Luis Rivera López y Gustavo Manzanal

Prensa: Paula Simkin