Los hermanos Jorge y Oscar Videla fueron declarados personalidades destacadas de la Cultura durante un acto en el Salón Perón de la Legislatura porteña. Ambos fueron los creadores de la primera Escuela de Circo Criollo de la Argentina en 1980, la segunda en América luego de la de Cuba: ‘Agradecemos todo el trabajo, la trayectoria de esta gran familia, que se hizo hoy presente’; afirmó la diputada Victoria Montenegro (UC), coautora de la iniciativa.
Germán Welchli (Frente de Artistas Ambulantes Organizados) afirmó que los distinguidos ‘ponen la fuerza por la cultura independiente’ y subrayó que ‘mis maestros aprendieron todo de ustedes’. Néstor Martellini (presidente de Circo Abierto) recordó que ‘hace 25 años fui a la escuela de circo’ y ‘desde ahí soy trapecista, sin ellos no existiría esta felicidad en mi vida’.
Martellini contó que muchos centros de enseñanza ‘surgieron de la escuela de circo criollo’. Y se mostró orgulloso por ‘el reconocimiento a artistas del circo, que somos una bocha y que sea oficial, como tienen muchos otros’.
Julieta Infantino (antropóloga e investigadora del CONICET) explicó que ellos son ‘nuestros maestros y pioneros, los cuales vienen de una tercera generación de artistas’. Recordó que el circo criollo se consolidó ‘a fines del siglo XIX, con los hermanos Podestá’.
Rememoró que los hermanos Videla, además de presentarse en innumerables ciudades del interior del país, también lo hicieron en el Instituto Di Tella, el Teatro San Martín y en la televisión con José Marrone o Carlitos Balá. Infantino contó que ‘para los 70 quedaban pocos circos de primera parte (malabares, acrobacia, equilibrios, comicidad y destrezas físicas) y segunda parte (obras teatrales del género gauchesco)’, y entonces los homenajeados de hoy, se decidieron a abrir una la Escuela de Circo. Allí ambos enseñaron ‘los distintos lenguajes del circo’ y ‘anécdotas’ de todo lo vivido en el interior de la gran carpa.
Oscar Videla, luego de recibir la distinción junto a su hermano, afirmó que ‘lo más lindo es recibir, esto fue hecho con las manos nuestras, los alumnos que formamos están acá’. La autora del homenaje fue la diputada Andrea Conde (UC).