Los bomberos de la Ciudad ahora cuentan con 116 equipos respiratorios para que puedan respirar aire limpio durante el incidente. Los equipos de respiración autónoma (SCBA, por sus siglas en inglés) son dispositivos de circuito abierto y presión por demanda. El aire respirable se suministra al usuario desde un cilindro de aire comprimido.
El SCBA consta de los siguientes componentes principales: máscara, regulador, reductor de presión con dispositivo de advertencia de baja presión, ensamble de cilindro y válvula, manómetro remoto y ensamble de portador y arnés. A esto se agregan componentes opcionales como la conexión de la línea de aire (ExtendAire II), sistema de llenado rápido remoto (Quick-Fill) y kit de lentes.
“Estamos entregando 116 equipos de oxígeno autónomo de última generación. Tenemos un Sistema de Seguridad para abordar el delito y las emergencias. Estamos dotando a nuestros hombres y mujeres que todos los días ponen en riesgo sus vidas para cuidar las de los demás”, sostuvo el ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad, Marcelo D’Alessandro,
Cuando el SCBA cuenta con conexión de la línea de aire, puede usarse como respirador de suministro de aire (SAR, por sus siglas en inglés). En esta configuración, el aire respirable se suministra al usuario desde una fuente de aire remota. La fuente de aire remota puede incluir uno o más cilindros de aire comprimido o un sistema compresor diseñado para cumplir con los requisitos de presión.
“El equipo respiratorio es un elemento fundamental para la tarea de rescate y extinción. Sabemos que lo que mata al ser humano no son las llamas sino que son los gases tóxicos. Por lo tanto, el hombre cuando ingresa tiene que estar protegido. Estos equipos tienen un sensor remoto que, ante situaciones de emergencias, permite al personal de rescate ir a buscarlo”, indicó el jefe del Cuerpo de Bomberos de la Ciudad, Juan Carlos Moriconi.