Julian Assange, fundador de WikiLeaks entró al edificio de la embajada de Ecuador en Londres el 19 de junio de 2012 para evitar la extradición a Suecia, que quiere interrogarlo sobre una controversial acusación de acoso sexual y coerción de dos mujeres. Sin embargo, si es extraditado corre el riesgo de ser entregado a los Estados Unidos para encarcelarlo, como él lo sostiene.
Allí se lo interrogaría por su rol como editor de su sitio web que publicó informes anónimos y documentos filtrados con contenido sensible en materia de interés público, preservando el anonimato de sus fuentes, que afectan la política exterior norteamericana, especialmente en relación con las guerras de Irak y de Afganistán.
Al ciudadano australiano se le ha otorgado asilo de conformidad con lo establecido en la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951, por la persecución política por el delito de espionaje en su contra, en Estados Unidos. Tampoco puede caminar por las calles del Reino Unido, ya que también podría ser enviado a los Estados Unidos.
Assange no ha podido salir de la Embajada por casi cinco años y no ha visto la luz del sol en 3 años ya que no cuenta con patio interior. Tanto sus derechos como los de su familia han sido severamente abusados. Cincuenta y nueve organizaciones que trabajan por temas legales y derechos civiles presentaron una queja formal ante las Naciones Unidas, que determinará si la situación en que se encuentra equivale a una detención arbitraria.
Tanto el Reino Unido como el Reino de Suecia se rehúsan a proveer de las garantías legales o diplomáticas de no extraditar a Julian Assange a los Estados Unidos, en violación respecto de sus obligaciones respecto de la Convención sobre refugio de 1951. Esto se da a pesar de repetidas solicitudes de Ecuador y otras organizaciones de la Sociedad Civil, como Amnistía Internacional.
Assange ha sido sujeto a severas restricciones a su libertad (en prisión, en arresto domiciliario y en la Embajada de Ecuador) desde el 7 de Diciembre de 2010. Su pasaporte fue confiscado en el mismo día.
En febrero de 2010, Estados Unidos inició una investigación penal por espionaje en contra de Assange y Wikileaks. La descripción dada al caso, tal y como consta en cables diplomáticos, fue “sin precedents en escala y naturaleza” y es clasificada como una de las mayores investigaciones jamás conducidas en contra de una publicación en la historia de los Estados Unidos de América. El FBI ha recolectado como mínimo más de 42,135 páginas de investigación en contra del Assange
Ordenes judiciales emitidas para obligar a Google a entregar información fueron reveladas a finales del año pasado, mostrando que los Estados Unidos de América buscan perseguir penalmente al señor Assange de conformidad con las siguientes disposiciones penales, por su trabajo como editor de Wikileaks
Espionaje
Conspiración para cometer espionaje
Robo y conversión de propiedad que pertenece al Gobierno de los Estados Unidos de América
Violación del Acta de Fraudes Electrónicos y Crímenes informáticos
Conspiración
La investigación sueca se inició seis meses después de la americana, pero ha permanecido en estado de investigación preliminar desde entonces. La fiscal no ha decidido si hay suficientes elementos para presentar cargos en su contra, pero también se rehúsa a presentar al juzgado evidencia exculpatoria para que el señor Assange pueda, de forma adecuada, retar las bases que sustentan su detención continuada. Dicha evidencia consiste en mensajes de texto entre las dos querellantes. Suecia ha aprobado todas las solicitudes de extradición por los Estados Unidos en los últimos quince años. Por su parte, el Reino Unido se rehusa a confirmar o negar si ha recibido una solicitud de extradición de Assange a Estados Unidos.
El costo de la vigilancia a la cual está sujeto el Señor Assange excede ahora más de los £11.8 milliones de libras esterlinas (más de $18 milliones de dólares). En una entrevista con el periódico británico The Guardian, el Canciller Ricardo Patiño reveló que Suecia ha negado la propuesta de Ecuador de establecer un acuerdo en orden a llevar a cabo el interrogatorio. De esta manera el programador, periodista y activista de Internet que ha denunciado las estructuras más importantes del poder mundial permanece privado de su libertad desde hace 5 años.
El editor ha recibido numerosos reconocimientos y apoyos por sus labores de parte de Amnesty International UK Media Award, Centre for Investigative Journalism, el diario Le Monde, la revista Time, la University of Sydney, entre otros, como el líder brasilero Lula Da Silva, los cienastas Ken Loach y Micheal Moore, el Premio Nobel de Medicina John Sulston y el juez Baltasar Garzón, entre otros.
Los mayores enemigos por sus actuaciones han sido El Pentágono de los Estados Unidos; Sara Palin, ex candidata a presidenta por el Partido Republicano; Bill O’Reilly, presentador de la cadena televisiva FOX o Tom Flagalan, del gobierno conservador de Canadá. Estos dos últimos pidieron públicamente que Assange se asesinado.