La oferta tiende a expandirse ya que es obligatorio por ley y muchos quieren aprovechar el nicho de mercado.

Se calcula que el 1 de cada 100 porteños es celíaco, que es la intolerancia al gluten de cereales (proteínas presentes en el trigo, avena, cebada y centeno). Por eso, muchos restaurantes de la ciudad ofrecen menús especiales para celíacos y otros se han especializado en ello; ya que desde 2015 entró en vigencia en el país la ley 27196. Se calcula que el 80 % de los alimentos procesados industrialmente contienen gluten y entonces hay que ser precavidos a la hora de pedir o preparar platos.

Hoy, de acuerdo a viaresto.com, hay más de 1800 restaurantes en la ciudad que ofrecen en sus cartas opciones sin gluten, aptos para celíacos. También están los gourmet y la revistaohlala.com y planetajoy.com contabilizaron más de diez entre los que se pueden mencionar Buenos Aires Verde (Gorriti 5657, Palermo), El Último Beso (Nicaragua 4880, Palermo),  Sintaxis (Nicaragua 4849, Palermo), Lotus (Arribeños 2265, Belgrano), Stavva (Montevideo 446, San Nicolás), Te adoro García (Teodoro García 2902, Colegiales), Bice (Av. Alicia Moreau de Justo 192, Puerto Madero) o Lo de Carlitos (Chile 342 , San Telmo)

Las sugerencias que hace la Asociación Argentina de Celíacos, más allá de sostificaciones y modas, son las siguientes:

“Cuide que las migas de la panera no caigan en su plato. Si así ocurre solicite un cambio. Si la manteca u otros aderezos que normalmente se sirven en los restaurantes no vienen en envase individual y tienen trazas de pan, no la consuma.

Si pide un jugo de frutas, asegúrese que sean de fruta natural, recién exprimida, sin agregados de jugos artificiales.

Siempre es agradable salir a comer fuera de casa. Otras veces es necesario, por motivos de trabajo. Por eso, le recomendamos identificar y seleccionar previamente restaurantes que tengan un menor riesgos de contaminación cruzada como por ejemplo los que ofrecen carnes asadas o a las brasas, pescados a la parrilla, papas cocidas, etc.

No se apresure a pedir platos que sean potencialmente riesgosos como guisos, salsas, sopas, embutidos, etc.

Como postres, seleccione frutas frescas. También puede probar otras opciones como flanes, siempre y cuando se elaboren sólo con leche y huevos.

Si usted tiene duda de la forma de preparación y de los ingredientes del plato elegido, pregunte cuantas veces sea necesario o directamente no lo consuma.”

Hay que tener en cuenta que la ley sancionada en 2015, en el artículo 4 bis establece que deben ofrecer menú para celíacos que cumpla con las condiciones de manufactura y los requerimientos nutricionales una gran variedad de establecimientos que van desde las cárceles, los hospitales, hoteles, instituciones de enseñanza, empresas de transporte, locales de comida rápida y por supuesto, los bares y restaurantes.