La histórica institución tiene nuevas autoridades, el director Héctor Marcelo Damonte y el subdirector José Catri, mientras que el proyecto de refuncionalización está en etapa de financiamiento. Los desafíos que esperan a la flamante conducción.
El hospital de Clínicas “José de San Martín” además de ser una de las instituciones de salud más antiguas de la Argentina, ya que data de 1881, es un gigante. Durante 2013 se recibieron más de 344 mil consultas externas, lo que equivale a 945 consultas por día. Es la capacidad de 6 canchas de River o 35 Luna Park. Esta dimensión hace que las tareas de mantenimiento sean casi inabarcables, además de que la mayor parte de los ingresos que reciben a través de la Universidad de Buenos Aires se va en sueldos.
“El hospital está asentado en un terreno de 2 hectáreas y tiene 130 mil metros cuadrados. Los más modernos como el Anchorena tienen 20 mil y son bárbaros. Es tan grande porque fue pensado en otra época. En 1927 se puso la piedra fundamental porque el otro quedaba chico y en los 50´, 60´ fue construido. Cada día pasa un pueblo por acá y eso va de la mano del estado de los ascensores”, explicó Damonte.
“Lo que se destaca de este hospital es la calidad de los médicos, la calidad humana de los trabajadores aunque el edificio es hostil arquitectónicamente, y se protesta por los ascensores. Cuando yo estudiaba acá en el 76´ había un solo ascensor y había que hacer colas de una hora”, agregó. En este sentido, destacó las inversiones que se vienen haciendo en los últimos meses que redituaron en que 17 de los 23 ascensores estén funcionando y un mes atrás se inauguraran ascensores.
En cuanto a los objetivos de su gestión, Damonte señaló que con los recursos actuales busca encarar un mantenimiento preventivo, “escuchar la problemática y tratar de resolverla”. “Se necesita mucho dinero para refuncionalizar. La semana pasada tuve una reunión en el Rectorado y el proyecto de refuncionalización está en la etapa de financiamiento. En principio buscamos fondos estatales y estamos hablando de 500 dólares el metro. Y el otro tema es el recurso humano. Por acá pasan todas las clases sociales y hay que apuntalar el sentido de pertenencia: mejorar las condiciones laborales, que anden los ascensores, que haya seguridad laboral y esparcimiento”.
Proceso de refuncionalización
El hospital comenzó un proceso integral de refuncionalización que permitirá la puesta en valor de las instalaciones. El principal objetivo de esta tarea es promover un hábitat seguro y eficiente optimizando el manejo de espacio e inmuebles con la accesibilidad y confort ambiental necesarios asegurando la preservación patrimonial, al tiempo que garantizando el funcionamiento continúo del mismo mientras se lleva a cabo el proceso de renovación.
En este breve período desde el inicio de las obras, se realizó la renovación de 11 baterías de baños públicos (una superficie estimada de 245 m2) en Planta baja, Entrepiso y Primer piso; se instalaron cuatro ascensores nuevos, se optimizaron y mejoraron los accesos accesos principales de Avenida Córdoba y Paraguay, se reacondicionó el sector de Esterilización en el piso 12 y se remodeló y equipó a nuevo la Sala de Internación del Servicio de Salud Mental.
Asimismo, en el piso 12, se reconstruyó el sector destinado a la División Hemodinamia, que ahora cuenta con tecnología de avanzada para realizar intervenciones y estudios cardiológicos. En este sentido, también se pusieron en funcionamiento equipos de alta complejidad para el diagnóstico por imágenes, como es el nuevo Densitómetro y el SPECT, para la atención de pacientes en Medicina Nuclear.
Estos son algunos avances que se realizaron y en este momento con el plano general de proyecto se están buscando los fondos para seguir desarrollando.
María Julieta Rumi / Minuto Uno
