Por Emiliano Delio

La Gran Renuncia, la obra que recrea con gran actualidad a La Fiaca, se presente en el Teatro Picadero (Pasaje Discépolo 1857) los viernes a las 22:00.  El protagonista (Gastón Coccihiarale) es un empleado que trabaja a toda hora, pero un día, decide desconectarse. Así replantea su vida por esa pérdida de autonomía, al estar pendiente permanentemente de las demandas laborales y sociales, que lo atan al teléfono y las redes.

Escrita y dirigida por Lisandro Fiks, con gran ritmo y humor, plantea cuales son las imposiciones y mandatos sociales. Así como en la original obra de 1967, la rebelión contra las obligaciones era no ir presencialmente a trabajar; en este 2023, pasa por desconectar el teléfono. Primero su pareja (Laura Cymer), queda perpleja de esta actitud y supone que es algo pasajero.

Pero la ausencia de respuestas a los mensajes y llamadas, hacen que su compañero de trabajo (Fiks) decida ir directamente a verlo de manera presencial a su casa.  Sin embargo, se encuentra con una persona que busca su esencia y sus primeros gustos, como en su infancia era practicar karate o leer un libro. Los recursos audiovisuales de la obra incluyen tras el escenario, la reproducción de memorables , como la película Corazón Valiente (1995) o la canción Hacelo por Mi (1990, Ataque 77); productos que ambos disfrutaban, sin la necesidad de compartirlo y estar pendientes de los “me gusta”.

Pero su “mini vacación” empieza a transformarse en problemática, cuando su jefa (Romina Fernandes), se presenta en su casa, luego del último acto heroico del protagonista en las redes: subir un video que denuncia la presión a la que es sometido durante las 24 horas, por las necesidades de la compañía, para que esté siempre al pie del teléfono, para solucionar cualquier vicisitud de la agencia de publicidad en la que trabaja.

Con un tono que despierta la risa de espectadores, se presentan las situaciones. A pesar de las presiones a la que es sometido, no abandona su postura y con cierta nostalgia, recurre a aquellos que vivieron la mayor parte de sus vidas sin comunidades digitales. Así busca un viejo aparato de teléfono con cable y lo conecta: consigue llamar a su abuelo (Luis Brandoni), pero para su sorpresa, le pide que lo llame por video conferencia (el actor tiene presencia virtual cada noche en la obra). También cuando se encuentra con su padre (Abian Vainstein), pero para su disgusto también está aggiornado, buscando parejas en Tinder y haciendo sus pedidos para su negocio por correo electrónico y mensajes de voz.

Lisandro Fiks explica como surgió la obra: “En 2021, los usuarios de teléfonos móviles pasaron frente a sus dispositivos un promedio de 4,8 horas al día (casi 2 meses y medio). La invasión de información y de comunicación permanente que vive una persona por tener celular es abrumadora. Por otro lado, esta comunicación acerca seres queridos que viven lejos, salva vidas, hace accesible la cultura a millones de personas… Entonces, ¿Ángel o demonio? ¿Cuál es el límite? ¿Podemos darnos el lujo de vivir sin celular? ¿Poseemos teléfonos o somos poseídos por ellos? Al leer La fiaca , la recordada pieza de Ricardo Talesnik, que a fines de los sesenta planteaba como acto de rebeldía negarse ir a trabajar, me pregunté ¿Cuál sería hoy un acto de rebeldía comparable? Ese fue el motor para escribir esta versión personal llamada La gran renuncia”

Ficha

Elenco:
Gastón Cocchiarale
Laura Cymer
Abian Vainstein
Romina Fernandes
Lisandro Fiks
Con la participación virtual de Luis Brandoni
Versión libre de La fiaca de Ricardo Talesnik: Lisandro Fiks
Diseño de proyecciones : Juan Selva
Diseño de iluminación : Agnese Lozupone
Diseño de escenografía y vestuario : Micaela Sleigh
Producción original : Complejo Teatral de Buenos Aires
Producción ejecutiva : Juliana Barisci
Fotografía de estudio : Carlos Furman
Música original : Daniel “Pipi” Piazzolla y Lisandro Fiks
Prensa y difusión: Tommy Pashkus Agencia
Asistente de dirección: Marcelo Chiyik
Dirección : Lisandro Fiks
Producción general: Gastón Cocchiarale y Lisandro Fiks