El ministerio de Educación de la Ciudad se mudó desde Paseo Colón 255 (a dos cuadras de la Plaza de Mayo) a Perette y Calle 10 (ex Villa Miseria 31). El cambio de localización de más de 2000 empleados porteños desde Monserrat a Retiro, se justificó por la urbanización de zonas que se consideraban marginales, como es el caso del Barrio 31; e incluyó la circulación interna de las líneas de colectivos 33, 45, 132 y 145 que pasaron de la avenida Castillo a la calle Perette, a la cual también se le incorporó una bici senda.

El nuevo edificio es de 26 mil metros cuadrados en siete pisos, dos subsuelos, salón comedor, salas de reuniones y estacionamiento para 124 autos. El inmueble forma parte del Polo Educativo María Elena Walsh que comenzó su ciclo lectivo en 2019 para la gente de la zona y ofrece nivel inicial, primario y un centro educativo de adultos.

“Esta es una gran noticia para todos los vecinos del barrio, porque la mudanza de un Ministerio (como nos pasó con el de Desarrollo Humano y Hábitat en el predio del ex Elefante Blanco) equivale a un gran crecimiento y desarrollo para todos los que viven cerca”, había afirmado el jefe de Gabinete Felipe Miguel en una recorrida a principios de mes.

Sin embargo, el traslado generó intranquilidad entre los empleados, ya que como ocurrió con el ministerio de Desarrollo Humano, que se construyó en Ciudad Oculta, aunque la seguridad en un principio estuvo garantizada por la presencia policial, esta no es permanente.

“Nos parece un cambio positivo en la manera de trabajar y cómo van a estar organizados nuestros equipos. Estar en el Barrio 31 es algo muy importante y va en línea con la integración que se está trabajando en la Ciudad”, manifestó en un comunicado oficial, Santiago Villaruel de la Subsecretaría de Coordinación Pedagógica y Educativa.

La apuesta a la integración del barrio 31, que nació en con la crisis de 1930 y creció hasta hoy alcanzando los 40 mil habitantes ha sido planificada en diversos pasos por las autoridades porteñas: “social, medioambiente y arquitectónico pero, por sobre todo, educativo. Así, se brindarán más y mejores oportunidades con el fin de que cada persona tenga las herramientas necesarias para elegir su proyecto de vida”.

En 2007, Mauricio Macri había planteado erradicar el barrio en su campaña para jefe de Gobierno. Pero una vez electo, enfrentó la presión de sus habitantes que pedían una urbanización, que se fue concediendo por etapas. En 2010 el barrio 31 constaba de casi 100 manzanas y menos de 30 mil habitantes. La expansión territorial con la 31 bis y habitacional, con la construcción de manera precaria de hasta siete pisos sobre las casillas; tornó cada vez más inviable la erradicación. Las autoridades decidieron en 2014 emplazar un muro y una reja de 2 metros de alto para separarla de la Autopista Illia. En 2015 se construyeron desagües y cloacas, entre otros avances, como el de 2019 la la escuela.

En este 2020, dentro del barrio hay un ministerio: “Creo que la mudanza es muy positiva. Trasladarnos al barrio tiene un gran significado porque va a ayudar a la zona a prosperar de manera económica y social”, evaluó Nicolás Díaz de la Subsecretaría de Tecnología Educativa y Sustentabilidad. Por otra parte en el edificio de Paseo Colón, funcionará hasta 2021 la Universidad del Docente (UniCABA), pero su destino final es incierto, aunque se especula con una subasta pública.

La sede oficial está emplazada en la zona noreste del barrio 31, a 5 cuadras de la terminal de ómnibus