El mural “El regreso de Quinquela”, realizado por el artista Alfredo Segatori en Barracas sobre Pedro de Mendoza y San Antonio, en el marco del Plan Integral de Saneamiento Ambiental (PISA) de la Cuenca Matanza-Riachuelo, fue inaugurado en los últimos días.

Con “El regreso de Quinquela” el artista plástico Segatori buscará inscribir su mural en el libro Guinness de los récords. Mide 100 metros de largo por 13 metros de altura (1.300 m2), es el más grande del país, llevó dos meses pintarlo y está realizado con aerosol a mano alzada.

En Villa Urquiza se había estrenado, dos meses atrás, el que ostentaba hasta ahora con 247 m2 el título de más grande de la Ciudad, firmado por Martín Ron.

Este proyecto fue realizado por el Ministerio de Gobierno de la Ciudad, a través de la Unidad de Proyectos Especiales Cuenca Matanza-Riachuelo (UPE-CUMAR), y se contó con la colaboración de la Jefatura de Gabinete y los ministerios de Ambiente y Espacio Público y de Desarrollo Económico.