La Fundación Tzedaká recibe remedios donados por personas que terminaron sus tratamientos sin utilizar todas las medicinas, para otros que los necesiten. Así, con la ayuda de voluntarios y laboratorios, creó un Banco Comunitario de Medicamentos, un programa de distribución gratuita para población vulnerable en todo el país. Solo en 2019 distribuyó medicación gratuita por un valor de $124.848.733 (a precio de venta al público) alcanzando a una población estimada en más de 35.000 personas.

Este es el único que trabaja sobre la base de un modelo que combina la labor profesional y voluntaria; ya que complementa la acción del Estado, brindando aquello que no se cubre a través de los diversos programas oficiales de prestación de medicamentos. Por su eficiencia y trayectoria, fue reconocido a través de un Convenio de Cooperación con el Ministerio de Salud de la Nación. Su Red Nacional de Distribución de Medicamentos alcanza a 135 hospitales públicos y organizaciones sociales en 20 provincias, proveyendo salud a miles de argentinos vulnerables.

Un alto porcentaje de la población beneficiaria de la Fundación se encuentra afectada por enfermedades graves como cáncer, asma, diabetes y otras detectadas tardíamente por falta de controles médicos periódicos. Desde la Fundación se trabaja para mejorar la calidad de vida de personas con enfermedades preexistentes y para instalar el concepto de prevención y el hábito del cuidado de la salud en la población.

Un equipo de profesionales farmacéuticos trabaja junto con equipos voluntarios para llevar adelante la misión. La tarea incluye recepción de recetas y preparación de los envíos; auditoría de tratamientos; gestión y clasificación de donaciones y compras eficientes y económicas. Todos estos procesos son controlados a través de un moderno sistema informático que permite el seguimiento de las compras, recetas y stock.