Esculturas, platas, grabados, serigrafías y litografías originales pertenecientes a una colección privada.
El Centro Cultural Borges presenta la muestra “El Surrealismo de Dalí” con obras gráficas originales del reconocido artista catalán Salvador Dalí. Comienza el 16 de mayo y se prolonga hasta el 11 de agosto en el Centro Cultural Borges de Viamonte 525 (Galerías Pacífico, Retiro). Está integrada por obras que abarcan un periodo desde la década del ’50 al ’80 de producción del artista y comprenden muy diferentes técnicas y materiales; esculturas, platas, grabados, serigrafías y litografías originales pertenecientes a una colección privada y que fueran cedidas por Enrique Sabater, secretario y administrador de Dalí desde el año 1968 a 1980,  para ser exhibida en forma itinerante en América Latina como forma de divulgación de la obra daliniana y aporte cultural a las artes plásticas


“El Surrealismo de Dalí” se presenta bajo la curaduría de Ignacio Shanahan y en la misma se pueden destacar las siguientes Series: del Tarot, Daliniana, los Apóstoles, Casanova, entre otras. Se puede visitar de lunes a sábados  de 10 a 21 horas y  domingos de 12 a 21 horas, con entrada general de 250 pesos (estudiantes y Jubilados  200 pesos) . Las obras de la exposición se acompañan con un guion curatorial con textos educativos y didácticos para el público general. Realiza la prensa Patricia Ludueña. 


Sobre el surrealismo 
Estado surreal perfecto se logra en la vigilia previa al dormirse, en donde se entremezclan en la mente las imágenes conscientes y las inconscientes oníricas del sueño”. Este movimiento tuvo su génesis en 1917 con el poeta Guillaume Apollinaire -que ya le da el nombre de Surrèalisme- y con el manifiesto que el poeta rumano Tristán Tzara publicó en 1918, en el que afirmaba el principio de la irracionalidad, la rebeldía y la negación. Se consolida como movimiento en Francia en 1924 con la edición del “Manifiesto Surrealista” de André Bretón, quien lo define como “Automatismo psíquico puro con ausencia de todo control ejercido por la razón y de toda preocupación estética y moral”.


El hermético grupo y la élite del surrealismo lo conformaban entre otros, Tristán Tzara, Paul Elluard, Hans Arp, Yves Tanguy, René Crevel, René Magritte, Joan Miró, y su pope mayor, André Bretón. Fue aceptado tardíamente Salvador Dalí, quien acuñó la frase “El Surrealismo soy Yo” al ser expulsado del mismo, convirtiéndose en un paradigma de todo el arte contemporáneo y de este movimiento particular, su mayor exponente.


Dalí desarrolló su Método Paranoico-Crítico que es llevar la mente en forma consciente al borde de la locura, provocarla, pero sin traspasarlo y crear dentro de ese límite crítico.Estas informaciones de la vida íntima y obra de Salvador Dalí, sus técnicas, materiales, asociaciones libres y sus decires, acompañan al público a lo largo del recorrido de la muestra a través de textos y paneles explicativos pensados para enriquecer la experiencia surrealista tanto del curioso principiante como del experto en Dalí.Sorprenden las series de plata, pues son muestra de la variedad de técnicas dominadas por el genio catalán. En la serie de “Las Profesiones” de serigrafía sobre plata se destacan El Médico, El Abogado, El Arquitecto y el Diseñador de Modas, realizadas en hasta 12 colores. La serie de las “Placas de Plata” en bajo y alto relieve incluye un homenaje a Pablo Picasso con un rostro cubista al que ciñe en sus sienes los laureles de la gloria como reconocimiento al otro gran español del Siglo XX. Pero fiel a la personalidad polémica del artista, el público puede leer en el recorrido “Los Decires de Dalí” que pueblan la exposición, y en uno de ellos se lee:
“Picasso es español, yo también. Picasso es pintor, yo también. Picasso es un genio, yo también. Picasso es comunista, yo tampoco”