El periodista Osvaldo Pepe fue declarado personalidad destacada de la cultura durante un acto en el Salón Perón de la Legislatura porteña. El diputado Roy Cortina (PS), saludó la autoría de la declaración al “felicitar por la iniciativa a la Defensoría del Pueblo”, que hizo uso de la presentación legislativa, como lo explicita la Constitución de la Ciudad, agregó que “Alejandro Amor es uno de los grandes defensores” que tuvo Buenos Aires y afirmó que Pepe es un periodista con valores y convicciones.
Amor explicó que “la lectura de Osvaldo, me sirve de guía para poder interpretar la realidad de la Argentina” y que aporta “una visión respetuosa, pero de firmes convicciones”, con una “escala de valores”.
Pepe, luego de recibir el reconocimiento, afirmó que “he sido y soy un periodista no mediático, no hice ni radio ni televisión” en sus 45 años de trayectoria. Agradeció la distinción y con humildad expresó que en realidad “el premio es a una generación que soy parte” y recordó “la sociedad industrial”, “los diarios de grandes tiradas”, “las sucesivas ediciones”, matinales, de la tarde, vespertinas y otras. También subrayó que las dictaduras que asolaron a su profesión y el jaqueo que tuvo la democracia en las diversas asonadas como las de 1987, 1988 y 1990.
El periodista afirmó que siempre fueron “testigos y no protagonistas” de los hechos del país, como muchos colegas con los que compartió redacciones y veladas en la madrugada luego de los cierres de ediciones. “Ese fue un periodismo que pasó y fue hermoso”. Se consideró “un trabajador de los medios gráficos”, que pasó por diversos puestos, desde el más bajo, hasta llegar a ser el editor del diario de mayor tirada del país. Contó que esta noche fue “el cierre de una etapa intensa de mi vida”, ya que en 2017 se jubiló.
Trayectoria
Osvaldo Pepe se inició en el periodismo profesional en 1972, en la revista Primera Plana. En 1973 pasó por los diarios Democracia y Mayoría. En 1976 ya trabajaba en la revista Goles, diario El Cronista, La Tarde (de Timerman) y editaba fascículos en la editorial Abril. Luego del golpe de estado, se conformó el Proceso de Reorganización Nacional (1976-1983). La flamante dictadura censuró y logró el cierre de los diarios Mayoría y El Cronista.
Pepe se quedó sin trabajo, pero luego lo consiguió en la revista deportiva Goles. Realizó la cobertura del mundial 1978 que se realizó en Argentina. En 1980, junto a tres compañeros, publicó un valiente reportaje al flamante Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel. Trasladado a la revista Radiolandia 2000, finalmente en 1981 fue despedido por pedido del vicealmirante Carlos Alberto Lacoste, el cual ejerció la presidencia del gobierno facto durante 11 días.
Pepe prosiguió como columnista en la agencia DYN (Diarios y Noticias). Luego, lo nombraron secretario de redacción del diario La Voz. Con el regreso de la democracia, el 10 de diciembre de 1983, empezó a trabajar en La Razón, como secretario de redacción. Y desde 1994 hasta su retiro, a fines de 2017, se desempeñó como editor y secretario de redacción en el diario Clarín.