Del martes 23 al jueves 25 de noviembre se realizará la 89ª reunión de la Asamblea General de INTERPOL en Estambul (Turquía). Allí  194 países miembros con sus policías buscan juntos para hacer del mundo, un lugar más seguro. Así desde Taiwan el Comisario del Buró de Investigación Criminal  Huang Chia-lu, propone “Combatir el cibercrimen en la era pospandemia: Taiwán puede ayudar” y a continuación presentamos el artículo.

La Interpol (International Criminal Police Organization) trabaja por la seguridad a nivel internacional, partiendo de la premisa que si una víctima de un delito cometido por alguien de otro país, las policías colaboran para atrapar a los agresores. La Secretaría General coordina actividades diarias para combatir una variedad de delitos, integrado por policías y civiles y comprende una sede en Lyon, un complejo global para la innovación en Singapur y varias oficinas diferentes regiones. La Asamblea General es órgano de gobierno y reúne a todos los países una vez al año para tomar decisiones, como las propuestas de Taiwan. 

Huang Chia-lu, Comisario del Buró de Investigación Criminal de la República de China (Taiwán).

En 2020 la pandemia del COVID-19 asoló gran parte del mundo, y a mediados de mayo de 2021 la República de China (Taiwán) experimentó un repentino aumento en el número de casos. Cuando Taiwán más necesitaba ayuda, compañeros como los Estados Unidos, Japón, Lituania, la República Checa, Eslovaquia y Polonia, así como COVAX Facility, un mecanismo de asignación global de vacunas del COVID-19, se comprometieron de inmediato a donar o proveer vacunas a Taiwán, con lo que este pudo volver a controlar la pandemia gradualmente.

Esto es un ejemplo de los esfuerzos conjuntos internacionales para afrontar los serios desafíos provocados por la pandemia. Se requerirán los mismos esfuerzos conjuntos para tratar el creciente cibercrimen internacional en la era pospandemia, y Taiwán está dispuesto a formar parte de dichos esfuerzos.

Sin embargo, la creciente dependencia en la cibertecnología ha facilitado más que nunca que los delincuentes se aprovechen de las vulnerabilidades de seguridad para cometer crímenes. Por este motivo, la ciberseguridad será uno de los temas más importantes en la era pospandemia, dado que es esencial para mantener la seguridad pública en todo el mundo.

Dado que el crimen cibernético trasciende fronteras, las víctimas, delincuentes y escenas del crimen pueden que se encuentren en diferentes países. El cibercrimen más común es el fraude de telecomunicaciones que utiliza

Internet y otras tecnologías de las telecomunicaciones. La cooperación transnacional es necesaria para llevar las redes internacionales de delincuencia ante la justicia.

En 2020 la policía de Taiwán utilizó los análisis de macrodatos para identificar múltiples ciudadanos taiwaneses que eran sospechosos de establecer operaciones de fraude de telecomunicaciones en Montenegro. Taiwán contactó con Montenegro y propuso asistencia legal mutua, con lo que permitió que la Oficina Especial del Fiscal del Estado de Montenegro pudiera proceder con el caso.

Mediante esfuerzos conjuntos, las fuerzas policiales de Taiwán y Montenegro descubrieron tres operaciones de fraude de telecomunicaciones y arrestaron a 92 sospechosos acusados de hacerse pasar por oficiales del gobierno, policías y fiscales chinos.

En 2019, la policía de Taiwán recibió información de CyberTipline, una red virtual privada del Centro Nacional de Niños Desaparecidos y Explotados de los EE. UU., en la que indicaba que un ciudadano sudafricano en Taiwán era sospechoso de haber subido grandes cantidades de pornografía infantil a Internet. Siguiendo esta pista, la policía de Taiwán rápidamente localizó al sospechoso y se registró su residencia, donde incautaron pruebas de pornografía infantil. Si la policía de Taiwán no hubiera recibido estas pistas, es probable que el sospechoso hubiera continuado agrediendo a más niños. El éxito de este caso se debe a la cooperación transnacional y al intercambio de información delictiva, que son fundamentales para frenar los crímenes de forma efectiva.

De la misma manera que el COVID-19, el cibercrimen puede afectar a personas en cualquier país. Por lo tanto, así como el mundo ha unido fuerzas para combatir la pandemia, la lucha contra el crimen cibernético requiere de la cooperación de las fuerzas policiales internacionales para asistirse y compartir información entre sí. Solo entonces se podrán prevenir más crímenes y resolver más casos eficientemente, lo que permitirá que las personas de todo el mundo puedan disfrutar de una vida más segura.

En 2021 el Buró de Investigación Criminal (CIB, siglas en inglés) estandarizó sus procedimientos de análisis del malware, además de establecer mecanismos de análisis de archivos y análisis de redes. La experiencia de Taiwán en la lucha contra los crímenes cibernéticos beneficiará los esfuerzos globales para construir un ciberespacio más seguro.

Los países miembros de la INTERPOL aprobaron los Objetivos Policiales Mundiales en 2017, con el propósito declarado de crear un mundo más seguro y sostenible. Con esta misión en mente, debemos trabajar juntos para combatir el crimen, de la misma manera que nos hemos unido para hacer frente a la pandemia. Por tanto, no se debe excluir a ninguna agencia policial o estado. Es menester una cooperación internacional para luchar contra el cibercrimen y fortalecer la ciberseguridad global de manera eficaz. Taiwán, que necesita el apoyo mundial, está dispuesto y tiene la capacidad de ayudar al mundo compartiendo su experiencia.

Este año mientras el mundo entero se une para combatir la pandemia, instamos a la comunidad internacional a apoyar, con el mismo espíritu, la candidatura de Taiwán para asistir a la Asamblea General de la INTERPOL

como observador este año y participar en las reuniones, los mecanismos y las actividades de capacitación de la INTERPOL. La participación pragmática y significativa de Taiwán ayudaría a hacer del mundo un lugar más seguro para todos.