El primer FEstival de TEatro MUsical (FETEMU) se realizó en 4 salas de la Ciudad de Buenos Aires durante 7 días con la presentación de 24 espectáculos nacionales e internacionales, charlas, encuentros, debates, talleres, mini recitales, eventos performáticos y callejeros, y clases magistrales dictadas por los principales referentes del género. Y ayer se entregaron los premios de la Asociación de Cronistas del Espectáculo (ACE), donde sobresalió en la terna de musicales, La Pathétique, con dos estatuillas.

Los musicales representaron parte de la época dorada argentina, entre las décadas de 1930 y 1960, con un promedio de casi 40 espectáculos en cartel por año con orquestas más de 30 integrantes, elencos numerosos con coreografía y lujosos vestuarios desplegados en escenarios con múltiples luces. Los premios ACE, los galardonan anualmente en la categoría. La Pathétique consiguió dos distinciones: Alejandra Radano como mejor artista femenina y Diego Vila como el mejor en dirección musical y arreglos. Por su parte Ardientes Gardel y Lepera por Los Amados, con dramaturgia de Alejandro Viola, ganó en la categoría de dirección y Máximo Meyer por su interpretación en Querido Evan.

La Pathétique se representó en el Cultural San Martín (Sarmiento 1551) el año pasado. Alejandra Radano en el unipersonal, se lució como cantante y actriz . El autor fue Fabián Luca y Diego Vila la acompañó desde el piano, con una heterogenea selección: desde clásicos de la lírica alemana hasta David Bowie o Radiohead.

Sobre el FETEMU

Este año se desarrolló el primer Festival de Teatro Musical en Buenos Aires entre el lunes 20 y el domingo 26 de noviembre en los teatros Border (Godoy Cruz 1838), Ópalo (Junín 380), Del Pueblo (Lavalle 3636) y la Usina del Arte (Caffarena 1). Participaron compañías no solo de la Ciudad, sino también de Mar del Plata, Bahía Blanca, Mendoza, Córdoba, San Miguel de Tucumán, La Plata, Santiago (Chile) y Lima (Perú); entre otras.

“Cuando las palabras no son lo suficientemente fuertes para un personaje, se transforman en canción y, cuando ambas cosas no alcanzan, estalla la danza”, describió Pablo Gorlero, director del FETEMU

Puntualmente el sábado en el Border se representaron Anarquía marítima, el mundo perdido en un juego de azar, donde Virginia Soledad Falcón y Federico Sebastián Lecanda, invitan a un viaje para que el público navegue en las decisiones, contradicciones y cotidianidades de las vidas, a través de un texto carnavalesco y reflexivo.

A las 22, Salustino Zavalía con gran humor y gran voz, acompañado por el maestro Alito Gallo, narró las vicisitudes de una cantante. El espectáculo, deriva del libro del mismo autor: Quisiera no tener corazón y ser hermosa. El artista nos invita a transitar por sus universos poéticos, donde lo femenino, el amor dislocado y la música se moldean en las contradicciones de una existencia en equilibrio precario. También se interpretan repertorios, a modo de homenaje y con gran altura, a referentes musicales contemporáneos, como los de Eladia Blázquez o Nacha Guevara.

Ficha
Idea: Salustiano Zavalía.
Actúa: Salustiano Zavalía
Músicos: Alito Gallo, Rodrigo Ferreyra
Utilería y dispositivos escénicos: Juan Aguilar y Mariana Delgado
Director de Arte: Juan Aguilar
Sonorización e iluminación: Rojas Tecnología para Eventos.
Producción artística: Sebastián Fernandez
Producción ejecutiva: Juan Logusso
Dirección de comunicación: Jorge Barnichea para Serendipia Plus
Diseño gráfico: Juan Pablo Barnichea para Serendipia Plus