El ministro Franco Moccia, el presidente del IVC Juan Maquieyra, Larreta y la legisladora Lía Rueda.

La Legislatura aprobó el jueves la creación del Plan de Vivienda Asequible con el objeto de fomentar la oferta de inmuebles con destino a vivienda única familiar de ocupación permanente para compra o locación, que residan o trabajen en la Ciudad. El viernes, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, presentó en esta línea el programa Casa Accesible BA, que dispone de una serie de incentivos a Pequeñas y Medianas Empresas (PyMEs) del rubro de la construcción para que los vecinos puedan comprar un departamento desde un 20% más barato.

Para poder acceder al programa los vecinos deberán tener entre 18 y 55 años, vivir o trabajar en la Ciudad y poseer un ingreso mensual equivalente a entre dos y ocho salarios mínimo, vital y móvil. Asimismo, se aceptarán ingresos informales y no se necesitará contar con el ahorro previo del 10%. Se entiende por vivienda asequible aquella a la que un grupo familiar, según los parámetros a definir por el Instituto de Vivienda de la Ciudad -IVC-, Autoridad de Aplicación, pueda acceder destinando como máximo el 30% del total de sus ingresos.

“Queremos ayudar a las familias a llegar al sueño de la casa propia. Lo que buscamos es llegar a igualar el costo del alquiler con el costo de la cuota para el mismo inmueble”, expresó Rodríguez Larreta

Impulsado por el Ministerio de Desarrollo Urbano y el IVC, el programa se divide en tres partes: cuando la construcción se lleva a cabo en una tierra de la constructora, el Estado aportará el 30%, las PyMEs tomarán un crédito constructor por el 60% con tasas preferenciales y el vecino sumará el 10% restante en concepto de ahorro previo, lo que representa la posibilidad de pagarlo en muchas más cuotas respecto a la situación actual.

Por otro lado, cuando se realiza en un terreno del Estado, las PyMEs van a aportar el 30%, además del 60% del crédito constructor, mientras que al vecino le corresponderá el 10% en concepto de ahorro previo.

“Los datos provistos por la Dirección General de Estadísticas y Censos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, demuestran el crecimiento del inquilinato en la Ciudad. Por ello, resulta importante desarrollar una política habitacional destinada a aquellos sectores socioeconómicos que, por sus condiciones, se vean con dificultades de acceder a una vivienda propia, aún cuando se encuentren fuera de la línea de pobreza. Entre las múltiples dificultades a las que se deben enfrentar estos sectores, se encuentran las complejas condiciones de acceso a los créditos hipotecarios, las recurrentes fluctuaciones de sus tasas, y la escasa oferta de vivienda asequible (producto del desarrollo de proyectos constructivos en aquellas zonas donde los metros cuadrados son más caros)”, según argumentan en los fundamentos del proyecto de la diputada Lía Rueda y pares del bloque oficialista.

Los vecinos podrán anotarse a través de un formulario en la página de Vivienda para luego ser seleccionados mediante un sistema de puntajes.

Una vez seleccionados, constituirán el ahorro previo del 10% durante el período de obra y, finalizados los trabajos, tomarán un crédito hipotecario con tasas preferenciales para terminar de comprar su vivienda con cuotas mensuales como las de un alquiler.

Algunos de los beneficios del programa son que genera más puestos de trabajo en la construcción, está enfocado en la PyMEs y no en las grandes empresas, el Estado no construye los departamentos sino las PyMEs constructoras, es sustentable porque no hay subsidios del Estado y todo lo que éste aporta lo recupera para poder seguir fomentando nuevos proyectos.