La arquitecta porteña Diana Saiegh, fue declarada personalidad destacada de la Cultura. El diputado Claudio Heredia fue el autor de la iniciativa y la describió por “su recorrido cultural de años”, que se reflejó en la gran cantidad de “artistas y funcionarios públicos” presentes, como el ministro de Cultura porteño Enrique Avogadro o la ex vicegobernadora bonaerense Graciela Giannettasio.

Alicia Santalo recordó que “somo arquitectas de la Universidad de Buenos Aires, de la misma camada, nos recibimos en 1975” y que con “el regreso de la democracia (1983), fuimos convocadas para recuperar el patrimonio de nuestra ciudad”, con la valorización de diversas construcciones como la casa chorizo, el conventillo o piezas emblemáticas de la “identidad de cada barrio”, como cines o “los 36 billares”.

Saiegh se desempeñó como docente y llegó a ser profesora titular en la carrera de Gestión Cultural en la Universidad del Salvador antes de la democracia. Pero entre 1989 y 1997 desempeñó diversos cargos en la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires: directora General del Centro Cultural Recoleta de 1989 al 1990 y de 1993 a 1997 y subsecretaria de Cultura de 1990 a 1992.

Santalo recordó la gestión de la homenajeada en el Recoleta, donde abrió paso a las vanguardias, como fue De la Guarda, el grupo originario del que se desprendió Fuerza Bruta, caracterizado por su la innovación y despliegue en grandes dimensiones. También contó sobre la intimidad de Saiegh, a la que caracterizó como “la mejor abuela” y que “cocina delicias en el Pesaj”.

Andrés Duprat, director del Museo Nacional de Bellas Artes en Buenos Aires, recordó que “cuando Diana dirigía el Recoleta, a mi me estallaba la cabeza”, por las múltiples propuestas realizadas. La caracterizó como “una gestora que no acata los mandatos, los tergiversa y los da vuelta”, para lograr que “proyectos imposibles se conviertan en realidades palpables”. También recordó que Saiegh “transformó la Casa de Cultura en París” perteneciente a la Embajada Argentina en Francia.

Luego de recibir el diploma que la transformó en destacada, la arquitecta confesó que “no imaginé este ambiente, impresiona”, refiriéndose al estilo y magnificencia del Salón Dorado de la Legislatura porteña. “Estamos celebrando la cultura, no celebrando a Diana y celebrar la cultura es celebrar la vida, a la que doy gracias”, enfatizó Saiegh.

La homenajeada recordó la primera edición de Arte BA en 1991, como un desafío planteado desde el Centro Cultural Recoleta, la cual convocó a una feria de galerías de arte de la Ciudad para realizar una exposición conjunta y que hoy en su edición 28 se ha convertido en espacio cultural ineludible.

“No creo que nadie pueda hacer nada solo, se trabaja en equipo”, por lo cual agradeció a los presentes de diversos espacios en los que trabajó, como el Museo del Tigre, Recoleta o Casa Argentina en París.

Se despidió afirmando que “la cultura tiene que ser una cuestión de estado; la cultura hace que seamos mejores personas, más sensibles y por lo tanto más generosas, que enseña a que no hay una sola verdad”, por eso destacó que es necesario siempre apoyarla y valorarla.

La homenajeada además, integró diversos equipos en el área de arte en las fundaciones Konex y Deloitte. Ha colaborado en la edición de numerosas publicaciones de arte y de arquitectura. Ha organizado muestras de arte en París y el país. Actualmente es curadora independiente e integra jurados de selección en distintos concursos nacionales y municipales.