Taiwan está conformada por su isla de Formosa, a 180 kilómetros al este del Continente. Cuenta con ciudades que conjugan la modernidad con las tradiciones, donde hay templos chinos, centros termales y terrenos montañosos. Taipéi, la capital en el norte del país está a casi 19 mil kilómetros de Buenos Aires. La ciudad cosmopolita cuenta con típicos mercados nocturnos orientales como el del callejón de las serpientes; el arte imperial chino  Museo del Palacio Nacional con una vasta colección; el Templo de Confucio y el Taipéi 101, un rascacielos en forma de bambú de 509 m de altura con un mirador, la que se llega por ascensores de alta velocidad.

En el mercado pueden comerse desde platos típicos orientales que incluyen unos huevos de codorniz a la parrilla o un pollo frito con tallarines, entre otros. También puede realizarse turismo en bicicleta, ya que el Taiwán cuenta con miles de kilómetros de ciclovías y senderos por toda la isla.

En las afueras de Taipéi se encuentra el Parque Nacional Yangmingshan, cuenta con baños termales de azufre. También desde allí se puede practicar senderismo por la zona montañosa. Viaja a la punta sur de Taiwán para visitar el parque Nacional Kenting. Allí hay playas, donde se puede bucear y ver los corales En el cañón de Taroko está el santuario de la Primavera Eterna, sobre una cascada y está rodeada por montañas.

El puerto pesquero de Bisha en Keelung es un importante mercado de pescados y mariscos. También se destacan sus cangrejos.  Cuenta con una zona de restaurantes en la que además de sus platos propios, cocinan lo que los  visitantes hayan comprado. También se pueden tomar barcos para realizar recorridos turísticos, contemplar el paisaje, pescar o visitar las aguas cercanas a Keelung.

El Museo Nacional de Historia combina los estilos de los palacios de la dinastía Ming y Qing. Con casi 50 mil obras de arte, la mayoría provienen del museo original de Henan devuelto por Japón después de la guerra. Contiene muchas colecciones, principalmente de arte chino: huesos de oráculo, bronces, jades, cerámica de la dinastía Chin con la pauta de la cuerda, cerámica del vidriado verde de la dinastía Han y cerámica de la dinastía Tang (Sancai). Además hay las colecciones de Taiwán, aborígenes y extranjeras.

El Museo de Ciencias Naturales la Ciudad de Taichung es interactivo, ya que se puede tocar y usar diferentes aparatos y objetos relacionados de manera didáctica y amena. Es el mayor museo de este tipo en la isla, y consta de un centro científico, un observatorio espacial, una sala de ciencias, una sala de ciencias chinas, una sala de paisajes mundiales, y un jardín botánico. Se puede actuar con muchos de los objetos expuestos: se explica la vinculación de la ciencia con las aplicaciones en la agricultura, la medicina y otras disciplinas. Los 4 grandes inventos chinos, el papel, la pólvora, la brújula y la imprenta, se explican y muestran en toda su riqueza científica. El jardín botánico abarca unas 4,5 hectáreas, con una 750 especies de las ocho zonas ecológicas de Taiwán. Son visitas preferidas donde casi siempre hay que hacer cola para entrar las presentaciones multimedia del espacio, la vida en relieve, las aves y el ambiente ecológico.

También se pude tomar el tren del bosque de Alishan, que sube por el empinado terreno boscoso hacia el resort de la montaña de Alishan. En las islas Matsu, hay muchas playas con templos, fuertes y túneles que fueron destacamentos militares. Taiwán tiene un clima subtropical, paisajes impresionantes, sitios religiosos y actividades al aire libre.